El Levante no tiene un Messi, ni un Cristiano, ni un Falcao, ni siquiera un Soldado. El Messi, el Cristiano, el Falcao o el Soldado del Levante es el alma del conjunto, un equipo lleno de personas que entienden cada partido como una oportunidad para mantener esa estrella que actualmente les acompaña y que en la mayoría de sus casos les ha sido esquiva, quizá injustamente, a lo largo de su carrera. Si, el alma da puntos. El alma de un equipo lleno de jugadores que mataría por ayudar a su compañero de al lado. Dirigidos por un fantástico entrenador como Juan Ignacio Martínez, sabedor de los defectos de su plantilla, premisa básica para el buen funcionamiento de un equipo de las capacidades del Levante, van a disfrutar de la UEFA Europa League y a buen seguro no van a correr riesgos para mantenerse en primera, ventaja de tener todos los automatismos perfectamente interiorizados, amén de esa espectacular fuerza del grupo de la que acabamos de hablar.
Enfrente, un
Espanyol al que como siempre da gusto ver jugar, pero al que le faltan
importantes cosas tácticas ademas de mentalidad ganadora, actitud en algunos casos, para que su vistoso estilo no quede con demasiada
habitualidad en buena imagen sin premio.
A todo esto,
la primera parte de los de Pochetinno fue fantástica: Verdu apareció con
frecuencia, Longo debuto dejando buenos movimientos sin balón como 9 y cuando
el Levante disponía del balón el repliegue visitante fue bueno. Tejera mejoro
el juego combinativo del Espanyol. Longo y el propio Tejera fueron los
protagonistas del primer acto con sendos golazos: el ex del inter fusilo a
Munua con un buen disparo desde dentro del área y Tejera ajusto al palo derecho
del portero un fantástico disparo desde la frontal.
Tras la reanudación
era muy difícil prever una remontada de tal calibre. Pero el Levante salió muy
mejorado. JIM introdujo a Michel en sustitución de Diop, retrasando posición de
Barkero, que a la vez que mejoro a Iborra aumento su presencia en el juego
combinativo.
El alma y el
coraje azulgrana llego a su máximo esplendor entre el minuto 54 y 55. Juanlu
maravillo al Ciutat con una volea magnifica desde la frontal del área y Chris
Lell se disfrazo de delantero para voltear la ventaja perica de una forma
impresionante. A medida que avanzaban los minutos y a su vez el cansancio
global, ambas escuadras fueron dando por bueno el empate. Ni siquiera la justa expulsión
de Iborra por doble amarilla en el 80 modifico la ambición perica, quizá injustificablemente
tras sus excelentes primeros 45 minutos.
Pero hay almas que tienen suerte. Al Levante le
quedaba un último coletazo de orgullo, personificado en una gran arrancada de
Michel por la izquierda, que tras maravillosa pared con Juanlu se adentro en el
área de C.Álvarez y su envío, aparentemente errado en busca de Ángel, toco en
las piernas de Raúl Rodríguez y enveneno el balón hacia dentro de la portería del
meta argentino. Era el minuto 93, ya solo quedaba tiempo para que el alma de
los jugadores levantinistas conectara con el alma de una hinchada acostumbrada
a emocionantes actos de un grupo de amigos que quiere alargar la mejor etapa histórica
del club valenciano. Levante: Munua, Lell, Ballesteros, Rodas, Juanfran, Iborra, Diop (Michel 46´) El Zhar (R.Garcia 80´), Barkero, Juanlu y Gekas (Ángel 80´). Espanyol: C.Álvarez, J.López, R.Rodríguez, Forlín, Capdevila, V.Sánchez, Tejera (H.Moreno 75´), R.Fonte, Verdu (Stuani 56´), Wakaso (Simao 51´) y Longo.
-Alex-
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